Rev. Méd. RosaRio 90: 28-36, 2024
REVISTA MÉDICA DE ROSARIO28
UTILIDAD DE LA PROCALCITONINA COMO BIOMARCADOR EN
PACIENTES CON ENFERMEDADES AUTOINMUNES Y SOSPECHA
DE INFECCIÓN
FRancisco JavieR consiglio
1
, RobeRto leandRo PaRodi
1
, MaRiana lagRutta
1
, cecilia deMaRía
1
,
báRbaRa balbi
2
, PatRicia noe sciaRRatta
2
, stella cRistina RadcliFFe
2
, alcides aleJandRo gReca
1
1- Servicio de Clínica Médica. Hospital Provincial del Centenario.
1 a Cátedra de Clínica Médica y Terapéutica, y Carrera de Especialización en Clínica Médica.
Facultad de Ciencias Médicas. Universidad Nacional de Rosario.
2- Departamento de Bioquímica Clínica. Laboratorio Central.
Hospital Provincial del Centenario.
E-mail: franciscojconsiglio@gmail.com
Resumen
Objetivos
El objetivo del presente estudio fue evaluar la utilidad de la procalcitonina como herramienta para distinguir entre
infección y reactivación en pacientes con enfermedades autoinmunes, pues conllevan diferente pronóstico, terapéu-
tica y seguimiento.
Pacientes y métodos
Se incluyeron adultos con enfermedad autoinmune y sospecha de infección o reactivación, prospectivamente desde
julio 2012 a abril 2014. Se realizaron cuidados estándares, incluso determinación de procalcitonina, proteína C
reactiva, velocidad de sedimentación globular y glóbulos blancos.
Resultados
Se incluyeron 34 casos clínicos. Edad promedio: 39,2±14 años, 79% mujeres. Enfermedad autoinmune prevalente:
Lupus eritematoso sistémico (52%).
Grupos: infectados (n=15), reactivados (n=15), y diagnóstico indenido (n=4). Los pacientes reactivados se subdivi-
dieron en dos subgrupos: pacientes con sospecha inicial de infección (n=7), y sin sospecha inicial de infección (n=8).
En contraste con los otros biomarcadores analizados, que no muestran diferencias signicativas entre infectados y
reactivados, la procalcitonina arroja diferencias importantes y estadísticamente signicativas entre estos grupos, e in-
cluso analizando subgrupos. Los glóbulos blancos y la proteína C reactiva se encuentran aumentados en infectados,
y si bien en algunos subgrupos muestran diferencias signicativas, no permiten diferenciar pacientes con claridad.
En infecciones bacterianas no localizadas la procalcitonina, con un punto de corte de 0,25 ng/mL muestra: sensibi-
lidad 88%, especicidad 94%, valor predictivo negativo 93% y valor predictivo positivo 90%.
Conclusión
La PCT ha resultado signicativamente elevada en infectados, y presenta adecuada sensibilidad, especicidad y
valores predictivos, lo que permitiría aumentar la probabilidad del diagnóstico de procesos infecciosos, en particular
de infecciones bacterianas no localizadas.
Palabras clave: Procalcitonina. Enfermedades autoinmunes. Lupus eritematoso sistémico. Infección. Reactivación
de enfermedad autoinmunes.
la PRocalcitonina coMo bioMaRcadoR en Pacientes con enFeRMedades autoinMunes
REVISTA MÉDICA DE ROSARIO 29
Introducción
En pacientes con enfermedades autoinmunes (EA)
que presentan síndrome febril o sospecha de infección,
resulta importante distinguir entre intercurrencia infec-
ciosa y reactivación de la enfermedad de base. Dado que
éstas pueden presentar manifestaciones similares, pero
conllevan diferente pronóstico, terapéutica y seguimien-
to, representan un real desafío para el médico internis-
ta. Los biomarcadores resultan útiles herramientas para
el razonamiento clínico. Se conoce que los escalofríos,
leucocitosis, y la proteína C reactiva (PCR) elevada
constituyen marcadores de infección,
1
sin embargo la
PCR y la velocidad de sedimentación globular (VSG)
también pueden estar elevados en procesos inamato-
rios no infecciosos, como durante las reactivaciones de
una enfermedad autoinmune. Por otro lado con la te-
rapia inmunosupresora se ve modicado el recuento de
glóbulos blancos (GB), lo cual limita el uso de dichos
parámetros como marcadores de infección.
2
La procal-
citonina (PCT) se ha propuesto como biomarcador de
Abstract
Objetives
e objective in this study was to evaluate the usefulness of procalcitonin to distinguish between are and infection in
patients with autoimmune disease. is implies dierent prognosis, therapy and follow-up.
Patients and methods
All adult patients with autoimmune disease and suspected infection or are were included prospectively from July 2012 to
April 2014. Standard of care, including the determination of procalcitonin, C-reactive protein, erythrocyte sedimentation
rate and white blood cells, was performed.
Results
irty four clinical cases were analyzed. Mean age 39,2±14 years, 79% women. Prevalent autoimmune disease: Systemic
lupus erythematosus (52%).
Groups: infected (n = 15), are of the autoimmune disease (n = 15), and indenite diagnosis (n = 4). In the ared group,
we considered two subgroups: patients with initial suspicion of infection (n = 7), and without initial suspicion of infection
(n = 8). In contrast with the other analyzed biomarkers, which did not dier between groups, procalcitonin showed
important and signicant dierences between infected patients and patients with autoimmune disease are. Procalcitonin
also show signicant dierences between infected patients and the subgroups of patients with disease are. In non-localized
bacterial infections, procalcitonin with a cut o 0.25 ng/mL showed: sensitivity 88%, specicity 94%, positive predictive
value 93% and negative predictive value 90%.
Conclusion: PCT was signicantly elevated in infected patients, and has good sensitivity, specicity, and predictive
values to predict infections in patients with autoimmune diseases, particularly non-localized bacterial infections. It would
increase the likelihood diagnosis of infections.
Key words: Procalcitonin. Autoimmune disease. Systemic lupus erythematosus. Infection. Autoimmune disease are.
infecciones y su utilización se ha estudiado en EA, par-
ticularmente en pacientes con lupus eritematoso sisté-
mico (LES).
3-5
Objetivos
Evaluar la utilidad de la PCT como herramienta para
distinguir entre infección y reactivación de la enfermedad
de base en pacientes con enfermedades autoinmunes.
Materiales y métodos
Estudio prospectivo, observacional, analítico, de ca-
sos y controles.
Pacientes:
Criterios de inclusión: Pacientes mayores de 18 años
con diagnóstico de EA que se atendieron en sala de in-
ternación o de emergencias del Hospital Provincial del
Centenario, Rosario, Argentina, por sospecha de infec-
ción o reactivación de enfermedad autoinmune, desde el
mes de julio 2012 hasta el mes de abril 2014.
Rev. Méd. RosaRio 90: 28-36, 2024
REVISTA MÉDICA DE ROSARIO30
Criterios de exclusión: fueron excluidos del estudio
aquellos pacientes que ingresaron con sospecha de EA,
la cual no fue conrmada durante la internación.
Grupo control: Pacientes atendidos en el hospital
con EA, sin ebre ni sospecha inicial de infección, que
presentan una reactivación de la EA.
Protocolo:
Se obtuvieron datos de la historia clínica y se aplicó
un protocolo de estudio habitual para estos pacientes,
consistente en radiografía de tórax, laboratorio básico,
hemocultivos, determinaciones iniciales de PCT, PCR,
VSG y conteo de GB, análisis inmunológicos acorde a
la patología (anticuerpos antinucleares (ANA), ANCA,
complemento, anti-DNA nativo, factor reumatoideo).
Otros estudios y cultivos fueron solicitados según re-
querimiento de cada paciente. Todos los procedimien-
tos fueron los estándares de atención habitual para estos
pacientes.
Fue aprobado por el comité de bioética del Hospital
Provincial del Centenario, y previo a la inclusión se ob-
tuvo el consentimiento informado.
La determinación de PCT se realizó con electroin-
munoluminometría (VIDAS B.R.A.H.M.S PCT),
una prueba automatizada con técnica ELFA (Enzyme-
Linked Fluorecent Assay) en suero de paciente estudia-
do, siendo necesaria la congelación de muestras en algu-
nas oportunidades. El límite de detección es 0,05 ng/ml,
y la sensibilidad funcional de esta prueba es 0,09 ng/ml.
Grupos de pacientes:
- Infección denitiva (“infectados”) (n=15): diag-
nóstico denitivo de infección por el médico tratan-
te en base a cultivos positivos, y/o evidencia clínica
clara y/o estudios por imágenes compatibles con
infección. Estos pacientes pueden tener reactivación
de la enfermedad autoinmune o no. Tres pacientes
presentaban infecciones denitivas y a su vez reacti-
vación de su enfermedad de base.
- Reactivación denitiva (“reactivados”) (n=15):
diagnóstico de reactivación de la enfermedad au-
toinmune según criterio de evaluación integral del
médico tratante (incluyendo SLEDAI en pacientes
con LES) y sin diagnóstico nal de infección.
Esta categoría a su vez, se subdivide en dos subgrupos:
A. Reactivación con sospecha inicial de infec-
ción (n=7): pacientes que ingresan con ebre, y/o
sospecha de infección por otro motivo en la evalua-
ción inicial, en los que el diagnóstico nal fue reacti-
vación de la enfermedad autoinmune sin infección.
B. Reactivación sin sospecha inicial de infec-
ción o grupo control (n=8): pacientes con reacti-
vación de la enfermedad autoinmune sin signos que
hagan sospechar infección en ningún momento de la
evolución.
- Diagnóstico indenido (n=4): pacientes en los
cuales no se pudo denir luego de la valoración in-
tegral si se trató de una infección o una reactivación
de la EA.
Los valores de procalcitonina no fueron utilizados
para clasicar a los pacientes en estos grupos de pacientes.
Se analizó también el subgrupo de pacientes con in-
feciones bacterianas no localizadas, pacientes en los que
está descripto que la procalcitonina no se modica.
3-5
Análisis estadístico: Se calcularon las medidas esta-
dísticas de resumen para los grupos estudiados. Los da-
tos se expresaron como media ± desvío estándar (DS) o
porcentaje según corresponda. Las variables cualitativas
se compararon con chi cuadrado o test exacto de Fisher
según corresponda. Las variables cuantitativas se com-
pararon aplicando análisis no paramétricos. Se realiza-
ron curvas ROC (del inglés Receiver Operating Cha-
racteristic curves) para determinar los puntos de corte.
Consideramos como estadísticamente signicativa una
probabilidad asociada menor que 0,05.
Resultados
Se analizaron 37 episodios. 3 pacientes se excluyeron
debido a que presentaron un diagnóstico nal no com-
patible con EA.
Características demográcas.
De los 34 episodios analizados 27 eran mujeres
(79%), la edad promedio fue 39,2±14 años.
Con respecto a las enfermedades autoinmunes, la
más frecuente fue lupus eritematoso sistémico (n: 18).
Veinticuatro pacientes presentaban EA estableci-
da. Cinco pacientes no estaban recibiendo tratamiento
inmunosupresor al ingreso: 4 por haberse realizado el
diagnóstico de la enfermedad autoinmunes durante la
internación, y un paciente por abandono de la terapéu-
tica. Todos los pacientes en tratamiento por EA recibían
corticoides, sólo o combinados con otros inmunosupre-
sores/inmunomoduladores (ver tabla 1).
la PRocalcitonina coMo bioMaRcadoR en Pacientes con enFeRMedades autoinMunes
REVISTA MÉDICA DE ROSARIO 31
pecha inicial de infección (n=7), y pacientes reactivados
sin sospecha inicial de infección (control) (n=8).
Análisis de los biomarcadores en los diferentes grupos:
Para el análisis se excluyeron los pacientes clasica-
dos como indenidos.
Se compararon el grupo de pacientes infectados ver-
sus reactivados. Por otro lado se comparó el grupo de
infectados con el subgrupo de reactivados con sospecha
inicial de infección, y el grupo de infectados con el sub-
grupo reactivados sin sospecha inicial de infección (con-
trol). Los resultados se exponen en la tabla 2.
Pacientes infectados versus reactivados (tabla 2):
Los valores de GB, VES y PCR no presentaron dife-
rencias estadísticamente signicativas entre el grupo de
pacientes infectados y el grupo de reactivados.
En cambio, la media de la PCT fue signicativa-
mente mayor en infectados (22,42±48,22 ng/mL) que
en reactivados (0,12±0,19 ng/mL), (p= 0,014).
Grupo infectados versus subgrupo reactivados con
sospecha inicial de infección (tabla 2):
En la comparación de este subgrupo se encontró una
diferencia estadísticamente signicativa en los valores de
GB en pacientes infectados versus el subgrupo reacti-
vados con sospecha inicial de infección: 13610±9196/
mm
3
, versus 6960±2974/mm
3
(p=0,03).
Los valores de VES y PCR no mostraron diferencias
estadísticamente signicativas entre ambos grupos.
Por último, en este subgrupo la PCT muestra una
tendencia no signicativa a valores más elevados en el
grupo infectados 22,42±48,22 ng/mL versus 0,18±0,27
ng/mL en el subgrupo reactivados con sospecha inicial
de infección (p= 0,086). Al realizar el análisis de los va-
lores de PCT con un punto de corte de 0,2 ng/m, se
observan diferencias estadísticamente signicativas en-
tre estos grupos (p=0,02).
Pacientes infectados versus subgrupo reactivados sin
sospecha inicial de infección (controles) (tabla 2):
No se encuentran diferencias estadísticamente signi-
cativas en los valores de GB, VES y PCR al comparar
el grupo de pacientes infectados versus el subgrupo re-
activados sin sospecha inicial de infección.
En cuanto a los valores de PCT, se mantiene en la com-
paración de este subgrupo diferencia estadísticamente
signicativa: 22,42±48,22 ng/mL en infectados versus
Enfermedad autoinmune de base
Lupus eritematoso sistémico 18
Hepatitis autoinmune 3
Artritis reumatoidea 2
Artritis reumatoidea juvenil 2
Eritrodermia psoriática 2
Poliangeítis microscópica 1
Enfermedad de Still del adulto 1
Síndrome antisintetasa 1
Enfermedad de Behcet 1
Neuritis óptica bilateral autoinmune 1
Dermatomiositis 1
Tratamiento inmunosupresor al ingreso
Sin tratamiento inmunosupresor 5
Corticoides exclusivamente 11
Combinación con azatioprina 6
Combinación con micofenolato 5
Combinación con hidroxicloroquina 4
Combinación con ciclofosfamida 2
Combinación con tocilizumab 1
Infecciones denitivas diagnosticadas
Infecciones bacterianas no localizadas
Neumonía adquirida de la comunidad 2
Peritonitis bacteriana espontánea 1
Shock séptico 1
Enfermedad pélvica inamatoria aguda 1
Artritis séptica 1
Sepsis por catéter 1
Pielonefritis aguda 1
Colangitis 1
Infecciones bacterianas localizadas
Infección de piel y partes blandas con colección 3
Infecciones virales
Citomegalovirus 1
Herpes zoster 2
Tabla 1. Características de los pacientes incluidos.
Características clínicas de los pacientes:
De los 34 casos 15 (44%) presentaban infección
denitiva, incluyendo 3 casos con infección y reacti-
vación de la enfermedad de base (fueron incluidos en el
grupo infección por denición).
En 15 pacientes (44%) se diagnosticó reactivación
denitiva. Dentro de este grupo se diferenciaron dos
subgrupos de pacientes: pacientes reactivados con sos-
Rev. Méd. RosaRio 90: 28-36, 2024
REVISTA MÉDICA DE ROSARIO32
0,07±0,04 ng/mL en el subgrupo reactivados sin sospe-
cha inicial de infección (p=0,02).
En el gráco 1 se muestran los valores de PCT en
los grupos infectados versus los subgrupos de pacientes
reactivados.
Se construyeron las curvas ROC para el grupo in-
fección, analizando las diferentes variables: GB, VSG,
PCR y PCT.
Con un punto de corte para la PCT: 0,2 ng/mL o
valores mayores se predice infección con una sensibili-
Biomarcador Clasicación n Media
Desvío
Estandar
p
Grupo infectados versus grupo reactivados
Leucocitos al ingreso
(/mm
3
)
Reactivados 15 9143,33 3651,13
0,17
Infectados 15 13610,00 9196,53
VSG ingreso (mm/1°hora)
Reactivados 14 59,21 47,60
0,77
Infectados 15 48,33 36,56
PCR ingreso
(ng/dl)
Reactivados 15 75,57 173,90
0,22
Infectados 15 90,37 108,15
PCT ingreso
(ng/ml)
Reactivados 15 0,12 0,19
0,014
Infectados 15 22,42 48,22
Grupo infectados versus grupo subgrupo reactivados con sospecha inicial de infección
Leucocitos al ingreso
(/mm
3
)
Reactivados con sospecha inicial
de infección
7 6960 2974
0,03
Infectados 15 13610 9196
VSG ingreso
(mm/1°hora)
Reactivados con sospecha inicial
de infección
6 48 36
0,61
Infectados 15 58 62
PCR ingreso
(ng/dl)
Reactivados con sospecha inicial
de infección
7 126,2 249,1
0,75
Infectados 15 90,37 108,1
PCT ingreso
(ng/ml)*
Reactivados con sospecha inicial
de infección
7 0,18 0,27
0,086
Infectados 15 22,42 48,22
Grupo infectados versus grupo subgrupo reactivados sin sospecha inicial de infección
Leucocitos al ingreso
(/mm
3
)
Reactivados sin sospecha inicial
de infección
8 11053 3184
0,90
Infectados 15 13610 9196
VSG ingreso
(mm/1°hora)
Reactivados sin sospecha inicial
de infección
8 59 38
0,40
Infectados 15 48 36
PCR ingreso
(ng/dl)
Reactivados sin sospecha inicial
de infección
8 31,2 49,5
0,11
Infectados 15 90,3 108,1
PCT ingreso
(ng/ml)
Reactivados sin sospecha inicial
de infección
8 0,07 0,04
0,029
Infectados 15 22,42 48,22
* Al realizar el análisis de los valores de PCT con un punto de corte de 0,2 ng/ml, se observan diferencias estadísticamente signicativas entre
los grupos infectados versus subgrupo reactivados con sospecha inicial de infección (p=0,02).
Tabla 2. Comparación de biomarcadores en la población total de pacientes.
la PRocalcitonina coMo bioMaRcadoR en Pacientes con enFeRMedades autoinMunes
REVISTA MÉDICA DE ROSARIO 33
Tabla 3. Comparación de biomarcadores en el subgrupo de pacientes con infecciones bacterianas no localizadas.
Biomarcador Clasicación n Media
Desvío
Estandar
p
VSG ingreso (mm/1°hora)
Reactivados 14 59,21 57,59
Ns
Infectados 9 58,67 43,04
PCR ingreso
(ng/dl)
Reactivados 15 75,56 173,89
0,035
Infectados 9 128,26 123,12
Leucocitos al ingreso
(/mm
3
)
Reactivados 15 9143 3651
Ns
Infectados 9 15727 11350
PCT ingreso
(ng/ml)
Reactivados 15 0,12 0,19
<0,0001
Infectados 9 37,29 58,72
Gráco 1. Diagrama de cajas: PCT al ingreso en los diferentes grupos de pacientes.
dad del 67%, un valor predictivo negativo (VPN) de
73,8% y una especicidad del 93%, y un valor predicti-
vo positivo (VPP) de 90,5%.
Análisis de los pacientes con infección bacteriana no
localizada versus reactivación y sus subgrupos:
Para realizar el análisis de este subgrupo excluimos
6 pacientes: 3 con infecciones virales, las 3 infeccio-
nes de piel y partes blandas (todas con colección) (ver
tabla 3).
Al realizar las comparaciones entre los grupos no se evi-
dencian diferencias signicativas en conteo de GB y VSG.
La PCR muestra diferencias estadísticamente sig-
nicativas, con valores elevados en ambos grupos de
pacientes: 128,26±123,12 ng/dL en infectados ver-
sus 75,56±173,89 ng/dL en reactivados (p=0,035).
Rev. Méd. RosaRio 90: 28-36, 2024
REVISTA MÉDICA DE ROSARIO34
Se realizó curva ROC y se determinó que el punto de
corte 41,5 ng/dL era el que mejor diferenciaba los gru-
pos de pacientes, con los siguientes valores: sensibilidad
67%, especicidad 77%, VPN 79%, VPP 63%.
Respecto a la PCT se obtienen diferencias estadísti-
camente signicativas (p<0,0001) comparando los gru-
pos infección: 37,29±58,72 ng/mL, versus reactivación:
0,12±0,19 ng/mL. Asimismo se mantienen las diferen-
cias estadísticamente signicativas comparando con los
subgrupos reactivación con sospecha inicial de infección:
0,18±0,27 ng/mL (p=0,008), y con los reactivados sin sos-
pecha inicial de infección: 0,07±0,04 ng/mL (p=0,002).
Se construyen las curvas ROC para la variable conti-
nua PCT en el grupo infección bacteriana no localizada
(ver gráco 2).
Con el punto de corte: 0,25 ng/mL, se obtienen los
siguientes valores: sensibilidad 88%; VPN 93%; especi-
cidad: 94%; VPP 90%.
Discusión
En los últimos diez años, se ha comenzado a utilizar
la PCT para diferenciar causas de ebre infecciosas de
las no infecciosas.
6-11
La VSG desde hace más de 90 años
y la PCR desde más de 30 años. Son rutinariamente
solicitadas como biomarcadores. Sin embargo, ambos
marcadores se elevan de manera inespecíca en la res-
puesta inamatoria, con lo cual no permiten diferenciar
las causas subyacentes.
12
La PCT es una proteína de 116 aminoácidos, pre-
cursora de la calcitonina.
6
La síntesis de estos péptidos
en sujetos normales está restringida principalmente a las
células C de la tiroides, sin embargo se ha visto que luego
de las tiroidectomías existe un incremento de la PCT en
varios estados inamatorios, sugiriendo que la produc-
ción del péptido en la respuesta inamatoria debería estar
en otros órganos como pulmón, hígado, páncreas y co-
lon.
13-15
La PCT se comporta como un reactante de fase
aguda positivo, como la PCR, así, su producción estaría
estimulada por los estados inamatorios, incluyendo las
infecciones
13
En la actualidad aún no se conoce que rol
desempeña en la sepsis, aunque estudios experimentales
sugieren que podría aumentar la respuesta inamatoria
disparada por lipopolisacáridos, TNF α, e interferón .
16
Los niveles séricos normalmente son indetectables
(<0,05 ng/ml). La vida media es de aproximadamente
un día, y no se modica por la insuciencia renal.
17
En
un estudio experimental en voluntarios sanos, luego de
un estímulo bacteriano, sus niveles aumentaron en 4
horas, llegando a su pico en 6 horas, y se mantuvieron
en meseta entre 8 a 24 horas.
8
Gráco 2. Curva ROC: PCT en el grupo infecciones bacterianas no localizadas.
la PRocalcitonina coMo bioMaRcadoR en Pacientes con enFeRMedades autoinMunes
REVISTA MÉDICA DE ROSARIO 35
Recientes estudios demuestran la utilidad de la PCT
en pacientes con infecciones bacterianas y síndrome fe-
bril. Si bien en la mayoría de los trabajos presenta una
baja sensibilidad, 65%, se ha comunicado un importan-
te valor predictivo positivo, 89% con punto de corte en
0,5 ng/ml, y de 100% con 1,2 ng/ml. En pacientes con
EA sistémicas, ebre e infecciones bacterianas existen
reportes que informan una tendencia similar, sensibili-
dad baja con alta especicidad, así lo describe un recien-
te metaanálisis.
19
Se propone que la baja sensibilidad de
la PCT probablemente tenga relación con el sistema de
medición de la PCT, tanto en los estudios en sepsis en
general como en este metaanálisis la mayoría de las me-
diciones fueron realizadas con Immunoassay LumiTest
que presenta una sensibilidad de 0,5 ng/ml. Sólo 2 es-
tudios utilizaron VIDAS assay (bioMèriux), que resulta
más preciso, sensibilidad 0,09 ng/ml, y ninguno utilizó
Kriptor procalcitonin assay (Brahms diagnostica) el mé-
todo considerado más sensible (0,06 ng/ml).
19
En nuestro estudio se utilizó electroinmunoluminome-
tría, que presenta un límite de detección de 0,05 ng/ml, y
una sensibilidad funcional de 0,09 ng/ml, si bien se han
obtenido resultados similares a los reportados por otros
autores, baja sensibilidad y elevada especicidad para
la detección de infecciones en general, al seleccionar
únicamente los pacientes con infecciones bacterianas
no localizadas y compararlos con los demás grupos la
sensibilidad, la especicidad y los valores predictivos de
la prueba mejoraron notablemente, estableciéndose una
diferencia en relación a lo publicado hasta la actualidad.
Los resultados obtenidos demuestran que realizando
la comparación tanto entre el grupo infectados con los
reactivados, como con los subgrupos de reactivados, la
PCT resulta claramente más elevada en el grupo infec-
ción con diferencias clínica y estadísticamente signica-
tivas en comparación con todos los grupos. La curva de
PCT muestra el mejor comportamiento respecto a los
otros biomarcadores para diferenciar infección de reac-
tivación en pacientes con EA. Una PCT de 0,2 ng/mL
o valores mayores indican infección con sensibilidad y
VPN cercano al 70% (67% y 73,4 respectivamente), y
alta especicidad y VPP, mayores al 90% (93% y 90,5%
respectivamente). Estos resultados son similares a los
que se describen en los estudios más recientes (19). En
un estudio de 79 pacientes con EA indica infección con
PCT 0,09 ng/mL o mayor (S:81% y E:78%), utilizando
el mismo método de medición.
20
Respecto de los falsos negativos observados en nues-
tro estudio, otros autores también describen que la PCT
no se elevaría en las infecciones bacterianas localizadas,
como así tampoco en infecciones virales.
3-5
Teniendo en
cuenta esto analizamos el subgrupo de pacientes con in-
fecciones bacterianas no localizadas, y realizamos nue-
vamente las comparaciones entre los grupos. Los valores
de VSG y GB no han demostrado utilidad. La PCR
muestra aumento signicativo en el grupo infección, sin
embargo con un punto de corte elevado: 41,5 ng/dL
(S: 67%; E: 77%). Por su parte la PCT ha mostrado
un comportamiento notablemente mejor, se encuentra
signicativamente más alta en los infectados versus los
reactivados y sus subgrupos. Con un punto de corte:
0,25 ng/mL, se obtuvo una S: 88%, VPN: 93%; E:
94%; VPP: 90% para predecir infección. Estos resul-
tados sugieren a la PCT como el biomarcador más útil
de los analizados, en detectar infecciones bacterianas no
localizadas en pacientes con EA.
Conclusiones
Este estudio muestra la utilidad de la PCT en un
escenario real de pacientes evaluados en un hospital con
EA, para diferenciar infección de reactivación de la en-
fermedad de base, mostrando mayor utilidad que otros
biomarcadores como los GB, VES y PCR. Los valores
de PCT resultaron claramente más elevados en pacien-
tes infectados que en los reactivados, y las diferencias
clínica y estadísticamente signicativas se mantienen in-
cluso estudiando diferentes subgrupos. Presenta buenos
valores de sensibilidad, especicidad, VPP y VPN para
detectar procesos infecciosos, siendo particularmente
útil en infecciones bacterianas no localizadas. El punto
de corte en este grupo de pacientes que mejor ayudó
a diferenciar infección de reactivación fue 0,25 ng/ml.
Serían necesarios estudios a mayor escala para con-
rmar estos datos y determinar el mejor punto de corte
a utilizar en diferentes escenarios.
Por último debemos recordar que si bien los biomar-
cadores son herramientas útiles para el diagnóstico dife-
rencial se deben analizar en el contexto de la evaluación
inicial integral del paciente, y deseamos jerarquizar que
de ninguna manera podrían reemplazar al juicio clínico,
debiendo ser considerados exámenes complementarios
propiamente dichos.
Conicto de intereses. Los autores declaran no pre-
sentar conictos de intereses para el desarrollo de este
estudio.
la PRocalcitonina coMo bioMaRcadoR en Pacientes con enFeRMedades autoinMunes
REVISTA MÉDICA DE ROSARIO36
Bibliografía
1. Kraus, A. Fever in systemic lupus erythematosus. In
Rheumatology. eds Klippel JH, Dieppe (Mosby, Barcelo-
na), 2nd ed. p 7.8.3, 1998.
2) Eberhard OK, Haubitz M, Brunkhorst FM, Kliem V,
Koch KM, Brunkhorst R. Usefulness of procalcitonin
for dierentiation between activity of systemic au-
toimmune disease (systemic lupus erythematosus/sys-
temic antineutrophil cytoplasmic antibody-associated
vasculitis) and invasive bacterial infection. Arthritis
Rheum 40:1250-6, 1997.
3. Delèvaux I, André M, Colombier M, Albuisson E,
Meylheuc F, Bègue R J, et al. Can procalcitonin mea-
surement help in dierenciating between bacterial
infection and other kinds of inammatory processes?
Ann Rheum Dis 62: 337-340, 2003.
4. Shin KC, Lee YJ, Kang SW, Baek HJ, Lee EB, Kim
HA, et al. Serum procalcitonin measurement for de-
tection of intercurrent infection in febrile patient with
SLE. Ann Rheum 60: 988-9, 2001.
5. Tamaki K, Kogata Y, Sugiyama D, Nakazawa T, Ha-
tachi G, Kageyama G, et al. Diagnostic accuracy of
serum procalcitonin concentrations for detecting sys-
temic bacterial infection in patients with systemic au-
toimmune diseases. J Rheumatol 35: 114-119, 2008.
6. Russwurm S, Oberhoer M, Zipfel PF, reinhart K. A
novel biochemical marker for the mediator-directed
therapy of sepsis. Mol Med Today 5:286-7, 1999.
7. Karzai W, Oberhoer M, Meier-Hellmann A, Rein-
hart K. Procalcitonin a new indicator of the systemic
respose to severe infections. Infection 25: 329-34,
1997.
8. Gendrel D, Bohuon, C. Procalcitonin a marker of
bacterial infection. Infection 25:133-4, 1997.
9. Brunkhorst FM, Eberhard OK, Brunkhorst R. Dis-
crimination of infectious and noninfectious causes of
early acute respiratory distress syndrome by procalci-
tonin. Crit Care Med 27: 2172: 2176, 1999.
10. Riche FC, Cholley BP, Laisné MJ, Vicaut E, Panis
YH, Lajeunie EJ, et al. Inammatory cytokines, C
reactive protein, and procalcitonin as early predictors
of necrosis infection in acute necrotizing pancreatitis.
Surgery 133: 257-262, 2003.
11. Schuetz P, Christ-Crain M, Wolbers M, Schild U,
omann R, Falconnier C, et al. Procalcitonin guided
antibiotic therapy and hospitalization in patients with
lower respiratory tract infections: a prospective multi-
center, randomized controlled trial. BCM Health Serv
Res 7:102, 2007.
12. Limper, M, Kruif, MD, Duits, AJ, Brandjes, DMP,
Van Gorp ECM. e diagnostic role of procalcitonin
and other biomarkers in discriminating infectious
from non-infectious fever. Jour Infec 60: 409-416,
2010.
13. Nishikura T. Procalcitonin (PCT) production in
a thyroidectomized patient. Intensive Care Med
25:1031, 1999.
14. Assicot M, Gendrel D, Carsin H, Raymond J, Guill-
baus J, Bohuon C. High serum procalcitonin concen-
tration in patients with sepsis and infection. Lancet
341:541-8, 1993.
15. Muller B, White JC, Nylén ES, Snider RH, Becker
KL, Habener JF. Ubiquitous exression of the calcito-
nin-I gene in multiple tissues in response to sepsis. J
Clin Endocrinol Metab 86:396-404, 2001.
16. Whang KT, Vath DS, Becker KL, Snider RH, Nylen
ES, Muller B, et al. Procalcitonin and proinamma-
tory cytokine interactions in sepsis. Shock 14:73-78,
2000.
17. Steinbach, G, Bolke, E, Grunert A, Orth K, Storck M.
Procalcitonin in patients with acute and chronic renal
insuciency. Wien Klin Wochenschr 116: 849-853,
2004.
18. Dandona P, Nix d, Wilson MF, Aljada A, Love J, As-
sicot M, et al. Procalcitonin increase after endotoxin
injection in normals subjets. J Clin Endocrinol Metab
79:1605-8, 1994.
19. Wu J, Lee S, Shen C, Hsieh Y, Yo P, Cheng H, et al.
Use of Serum Procalcitonin to Detect Bacterial Infec-
tion in patients With Autoimmune Diseases. Arthritis
Rheum 64(9):3034-42, 2012.
20. Joo K, Park W, Lim MJ, Kwon SR, Yoon J. Procalci-
tonin in Autoimmune Diseases. Immunology, Aller-
gic Disorders & Rheumatology. J Korean Med Sci 26:
1147-1151, 2011.