rev. Méd. rOsariO 88: 112-113, 2022
GIOVANNI BATTISTA MORGAGNI. AL MAESTRO CON CARIÑO
Las consecuencias de lo que él trabajó se cosecha- dico muy célebre, por cierto. Pero el destino le tenía
ron en Londres, París, Viena y Berlín. Por lo tanto, po- reservado otro transitar. En septiembre de 1711, la Uni-
demos decir que, comenzando con Morgagni y el resul- versidad de Padua lo invita a desempeñarse como pro-
tado de su trabajo, el dogmatismo de las viejas escuelas fesor en la segunda cátedra de Medicina Teórica. El 17
fue completamente despedazado, y que con él comienza de marzo de 1712, dicta su conferencia inaugural Nova
la nueva medicina.
Rudolf Virchow
Institutionum Medicarum Idea, donde efectúa una pro-
puesta educativa del medicus perfectissimus. Morgag-
El siglo XVIII puede ser catalogado como la al- ni insistía que los estudiantes debían ser inicialmente
borada de la medicina moderna. La centuria fue testigo capacitados en matemáticas, posteriormente química,
del desarrollo de una práctica sustentada en el método botánica y zoología, para finalmente concentrarse en la
científico en gran medida impulsada por el iluminismo. anatomía. En ese recorrido, los datos empíricos, sean a
Esta línea de pensamiento apuntaba a lograr sistemas ra- través de observaciones o como experimentos, eran cru-
cionales, medicina incluida, a la par de desarrollar prác- ciales para la búsqueda de la verdad; lo que se dice un
ticas preventivas y transmitir los nuevos conocimientos probado moderno. Pocos años después, concretamente
al mayor número posible de personas, con miras a me- en 1715, el senado veneciano nombra a Morgagni en la
jorar la condición humana. Podríamos coincidir en que primera cátedra de Anatomía de Padua. Su reputación
la Ilustración abrazaba con mucho optimismo esa salu- como profesor trascendió las fronteras nacionales y con-
dable visión sobre la capacidad del hombre para someter tinentales, lo que derivó en una mayor concurrencia de
las tradiciones heredadas al análisis racional y al debate estudiantes tanto peninsulares como extranjeros. Con-
abierto. Fue una época prolífica en los distintos campos citó el aprecio de las autoridades y estudiantes, por su
del saber y en lo que hace a la Medicina la figura de Gio- trato jovial y caballeresco. También obtuvo las membre-
vanni Battista Morgagni es a todas luces prominente.
sías de las sociedades científicas más prominentes de la
Morgagni nació en Forli, una pequeña ciudad de Europa settecentesca y sus colegas se referían a él como
la Emilia-Romagna, el 25 de febrero de 1682. Mientras “su majestad anatómica” o “el príncipe de todos los ana-
cursaba sus primeros estudios ya era visible su interés tomistas europeos”. Tras 60 años de una vida académica
por la medicina, la literatura y filosofía. Con apenas 16 tan fecunda, esa ciudad que lo cobijara lo vio partir un 5
años, se marcha a Bolonia y obtiene los grados de doctor de diciembre de 1771 a raíz de una ruptura ventricular.
en medicina y filosofía en 1701. Tras ello es designado Tenía 89 años.
Prosector en Anatomía bajo la tutela de Antonio Maria
A través de su investigación anatómica basada en
Valsalva, en la misma ciudad. Cuando Valsalva se tras- tantísimas disecciones, Morgagni apuntó a encontrar
lada a Parma, Morgagni toma el cargo de Demostrador correlaciones entre los síntomas clínicos y los hallazgos
en Anatomía. En aquella época publica su primera obra, post mortem. En este contexto se abocó a explorar el
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Adversaria Anatomica Prima (1706). A comienzos de origen y el asiento de enfermedades vía de las modifi-
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707 renuncia a su posición y se dirige a Padua para caciones patológicas observables en el cadáver. Según
cursar estudios de postgrado en la disciplina. Dos años él, el síntoma era el grito del órgano enfermo. Atento
después regresa a Forli donde se establece como un mé- a su visión, asimismo incursionó en la experimentación
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El segundo volumen, Adversaria Anatomica Altera se publicó en 1717, y el volumen final, Adversaria Anatomica Omnia, en 1719.
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